Construyendo una economía que perdure
A medida que diseñas tu economía y los mecanismos que la mantienen en funcionamiento, tendrás que decidir cómo se valoran y distribuyen los recursos en tu juego. Esto puede tener un impacto significativo en tus ingresos generales, así que quieres hacerlo bien.
La economía puede referirse a una serie compleja de relaciones entre la gestión, producción y uso de nuestros recursos y dinero. Las economías de los videojuegos pueden ser menos complejas que las economías del mundo real, pero aún siguen los mismos principios y contienen muchos de los mismos elementos basados en la compra, el intercambio y la venta de bienes.
Las monedas virtuales pueden estar vinculadas a dinero del mundo real, o a algo que se puede obtener a través de acciones dentro del juego, y puede afectar en gran medida cómo las personas juegan a tu juego. Cualquiera que se haya topado con un truco de paquete de dinero infinito puede dar fe de eso.
Para entender cómo funcionan las economías en los juegos, considera los juegos de fusión. Estos son juegos de rompecabezas que giran en torno a generar objetos y luego fusionarlos para crear versiones más efectivas de esos objetos.
Por ejemplo, tu juego de fusión puede implicar la creación de un imperio de casas. Así es como podría funcionar:
Los jugadores comienzan su juego con pequeñas casas que generan ingresos con el tiempo, generalmente en forma de monedas.
Pueden usar monedas para comprar más casas y fusionarlas para mejorarlas.
Las casas mejoradas (como mansiones o palacios) generan más monedas y crean una sensación de progreso permanente.
En el ejemplo anterior, las casas y las monedas son los recursos cruciales que desempeñan diferentes roles.
Las casas (bienes virtuales) son compradas y consumidas (fusionadas) por los jugadores. También dictan la progresión del jugador.
Las monedas (moneda virtual) son la moneda común utilizada para las transacciones dentro del juego. También están disponibles en la tienda del juego, a cambio de dinero real.
La economía de este juego depende del flujo de los recursos (casas y monedas) entre diferentes sistemas y bucles del juego.
Para entender correctamente el flujo de recursos entre los diferentes bucles de juego, necesitas categorizarlos como fuentes o sumideros. Las fuentes representan lugares o formas en que los jugadores pueden obtener moneda, y los sumideros representan lugares o formas en que los jugadores gastan moneda.
En el ejemplo anterior, la fuente es el ingreso generado por las casas, y el sumidero es el precio de las casas nuevas.
Las fuentes y los sumideros están inextricablemente vinculados, y la forma en que interactúan entre sí es un elemento clave en cómo están motivados tus jugadores para seguir jugando. Si hay un desequilibrio serio, puede perjudicar la jugabilidad de tu juego.
Si la fuente de ingresos es significativamente mayor que el sumidero (precio), entonces el juego carece de desafío y podría volverse aburrido. Esto también no da a los jugadores ninguna razón para comprar monedas en la tienda.
Si la fuente de ingresos es significativamente más baja que el sumidero (precio), entonces el juego podría volverse demasiado difícil o punitivo. Los jugadores pueden frustrarse si necesitan acumular moneda en exceso.
Siempre considera la dificultad de tu juego y asegúrate de que tus recursos no hagan que el juego sea demasiado simple o demasiado difícil de completar sin ellos.
Dáte formas de rastrear inventarios y moneda a lo largo del tiempo para que puedas detectar desequilibrios que afectan la experiencia de los jugadores, como la acumulación, el crecimiento descontrolado o las graves escaseces.
Intenta construir tu economía teniendo en cuenta la progresión del juego, de modo que ningún objeto sea inútil en ninguna etapa del juego, mientras aseguras que haya cosas que perseguir que puedan tener un gran impacto para los jugadores experimentados.
La economía dentro del juego es un punto focal para la monetización, el compromiso y la retención de jugadores. Incluso las economías de juego que parecen más complejas son efectivas porque aciertan en lo básico. Consulta la segunda guía de esta serie para aprender a crear una economía bien equilibrada.
No hay dos jugadores iguales; tu economía debe tener eso en cuenta para asegurar que todos los jugadores tengan una experiencia positiva con tu juego. Consulta la tercera guía de esta serie para aprender a diseñar pensando en los jugadores.
Con Unity Economy, puedes construir una economía personalizada dentro del juego y ofrecer a tus jugadores compras sin interrupciones, conversión de divisas, gestión de inventario y más.